Basada en la popular novela gráfica de Sara Varon, cuenta la historia de Dog, un perro solitario que vive en Manhattan. Dog ve en la televisión un anuncio publicitario en el que se recomienda la ‘adopción’ de un robot para tener un amigo para siempre. Lo pide y cuando llega la esperada caja se pone manos a la obra para montar el robot y así tener un amigo de verdad. Su amistad crece hasta hacerse inseparables, al ritmo del Nueva York de los 80. Una noche de verano, Dog, con gran pena, se ve obligado a abandonar al robot en la playa.

Pablo Berger, uno de los directores más aclamados en el cine español actual -es autor de la maravillosa ‘Blanca Nieves’- se enamora de esta novela gráfica y decide arriesgarse y rodar su primera película de animación. El resultado es una cinta deliciosa sobre la amistad, la lealtad y la fraternidad. También sobre la soledad de Dog y cómo la supera adquiriendo su robot de compañía. La amistad no se puede comprar, se suele decir, pero en este caso es la desesperación del perro al no tener amigos la que le lleva a esta feliz idea.

En nuestro mundo, la amistad sigue siendo uno de los valores más importantes. Los humanos necesitamos de otros para poder desarrollarnos, evolucionar, enriquecernos o aprender a amar. Esto nos llevaría a reflexionar sobre: ¿qué seríamos sin la amistad? Seguramente, seres perdidos en la inmensidad de este mundo en el que echaríamos de menos las risas y los buenos momentos que compartimos cada día con algunas de nuestras almas gemelas o con nuestros amigos.

Para todas aquellas que deseen, por un lado, volver a ser niñas o niños y que se dejen envolver por la historia de Dog, verán en esta película las huellas que crea la amistad. La tristeza y desazón de Dog cuando tiene que dejar a su amigo de hojalata en la playa conmueve y nos hace derramar lágrimas. La peripecia de Dog para conseguir volver al lado de su amigo es la de la paciencia y la espera. Que las hojas del calendario pasen para volver a recogerle cuando comience el verano, es su único pensamiento. Todos los días mira a través de su ventana para observar la luz del sol, pero sigue siendo invierno en el exterior y en su corazón.

Pero “nuestro gozo en un pozo”, porque es otra persona solitaria la que encuentra al robot, logra arreglarlo y se lo lleva a casa, llenando el vacío de otro hogar y de otro corazón solitario. La vida vuelve a sonreír a robot, que mira por la ventana, al igual que Dog. Un buen día el robot ve a Dog, acompañado de otro robot de nueva adquisición y baja corriendo para reencontrarse con su anterior amigo. A pesar de todos los esfuerzos, lo vuelve a perder. Es cuando comprende que la amistad a veces también supone perder a unos y encontrar a otros nuevos amigos. El sol ha salido en sus vidas.

La banda sonora de Robot Dreams es también muy recomendable. Es una película redonda.

ROBOT DREAMS - TRÁILER OFICIAL (HD): https://www.youtube.com/watch?v=DJ5hfqOmZug